miércoles, 16 de diciembre de 2009
Con mucho amor para mis dos amigas meigas. La Maga
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
El corazón es de la misma sustancia que el cielo.
Para un pensamiento alegre es
como la Estrella de los Justos, o un feliz presagio.
Para un pensamiento encolerizado es
como la tempestad y la tormenta.
Para un pensamiento compasivo es
como la brisa y el rocío.
Para un pensamiento severo es
como un sol ardiente o una helada otoñal.
Todos esos aspectos se alternan, basta con aceptar su irrupción o desaparición para sentirse libre como el universo,
de la misma sustancia que el cielo.
Hong Zicheng.
3 comentarios:
Me voy a comentar a mí misma en mi mismidad ,porque me apetece.
He ido a Australia un ratito y mira lo que me traje, Carmen.
¡donde estén las orondas diosas de antaño que se quiten las de hoy !
Marigaila ¿andas por ahí?
Si, aqui ando que alegría verlas de nuevo. Gracias gracias gracias casi lloro al verlas, oh.
Por fin, por fin, por fin, ya he llegado para abrazar a mis amigas meigas, casi se me desata el ombligo cuando descubrí a nuestras maravillosas diosas aquí, en brisas.
Gracias cronopia, ¡que regalo!, he vuelto a revivir aquella mágica jornada en la que rescatamos el tronco caído para volver a darle vida a orillas de Fonforrón.
Publicar un comentario