
Bodegón de Frida Kahlo pintado poco antes de morir.
Vivió apasionadamente hasta el último minuto de su vida
El corazón es de la misma sustancia que el cielo.
Para un pensamiento alegre es
como la Estrella de los Justos, o un feliz presagio.
Para un pensamiento encolerizado es
como la tempestad y la tormenta.
Para un pensamiento compasivo es
como la brisa y el rocío.
Para un pensamiento severo es
como un sol ardiente o una helada otoñal.
Todos esos aspectos se alternan, basta con aceptar su irrupción o desaparición para sentirse libre como el universo,
de la misma sustancia que el cielo.
Hong Zicheng.
1 comentario:
Hola Cronopía,
Yo me quedo con esta pasión por la VIDA.Mordiendo sandias y dejando que su líquido inunde mi boca y mi ropa sin pudor.
Asín que, este finde vaciaré mi "pozo negro" y seguiré haciendo lo mejor que sé hacer: dar de beber y comer; en nuestro querido Brisas.
Pondremos los fogones a hervir y a su calor calentaremos nuestras íntimas suculencias como venimos haciendo desde antaño, desde que el mundo es mundo, desde que nos conocemos.
Un beso y que nuestras dos razas sigan manteniendo el cordón umbilical que las une a la Madre Tierra: nutriente de vida, elixir de verdad que tan sólo los Dioses comparten; y que de vez en cuando,se pasan por el Brisas.
¡Que ganas de lanzarme al vacío de ese vientre en flor, rojo, que se asoma a través de Frida.
Mas y mas besos.
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