
Yumi, Arco Japonés
A la vista de todas las batallas
el guerrero deja su arco y lanza su última flecha
se pierde entre la inmensidad del universo.
La intención es firme, el camino es recto
Ambos saben que caminan hacia su centro.
El corazón es de la misma sustancia que el cielo.
Para un pensamiento alegre es
como la Estrella de los Justos, o un feliz presagio.
Para un pensamiento encolerizado es
como la tempestad y la tormenta.
Para un pensamiento compasivo es
como la brisa y el rocío.
Para un pensamiento severo es
como un sol ardiente o una helada otoñal.
Todos esos aspectos se alternan, basta con aceptar su irrupción o desaparición para sentirse libre como el universo,
de la misma sustancia que el cielo.
Hong Zicheng.
2 comentarios:
Cuando el guerrero pierde su cabeza
apunta desde el centro,
¿hacia dónde?.
Ya no encuentra a dónde lanzar sus flechas,
y vive en paz.
En plano creativo encontré algo muy bello sobre el arquero: "Una y otra vez el arquero es atravesado por flechas. Se da cuenta de su verdadera identidad: él es la presa". JODO
Un beso.
Publicar un comentario